Lo bueno, lo malo y lo inesperado

Una estancia en un hotel restaurado con encanto y vistas espectaculares. Las habitaciones son amplias y cálidas, ideales para desconectar sin TV. El desayuno, abundante y de calidad, destaca especialmente. El personal, amable y sincero, contribuye a la experiencia. Sin embargo, el acceso a la cena puede no ser siempre garantizado.

El desayuno ofrece opciones deliciosas y frescas.

La falta de aire acondicionado fue insoportable durante nuestra estancia. No podíamos dormir bien por el calor excesivo. Además, la cena no estaba siempre disponible, así que tuvimos que ir en coche a buscar comida, lo cual es inaceptable en un lugar que se supone debería ofrecer servicios completos.

La casa es preciosa con un entorno natural increíble. La cena no era siempre disponible, así que había que conducir para comer.

La casa es un verdadero refugio, situada en lo alto de una colina con un entorno natural excepcional. Nos encantaron las vistas a las montañas y la tranquilidad que se respira, lo que nos permitió desconectar completamente. La habitación era espaciosa y decorada con un gusto exquisito. El desayuno ofrecía opciones como zumo de naranja natural, croissants frescos y embutidos deliciosos, lo que hizo nuestras mañanas aún más agradables. La amabilidad de Joxe Mari fue un plus, siempre atento y con recomendaciones sobre rutas para explorar.

El acceso a la cena no siempre está garantizado, lo que puede ser un inconveniente.

El entorno natural del hotel es impresionante, ideal para quienes buscan desconectar. Nos atendió Joxe Mari, quien nos hizo sentir como en casa desde el primer momento. Las habitaciones son muy cómodas y tienen todos los detalles que uno espera. No se puede dejar de mencionar los deliciosos desayunos y cenas que ofrece el lugar.

totalmente recomendable

Las habitaciones son espaciosas y acogedoras, con un ambiente muy cálido gracias al hogar de leña. El desayuno ofrece una variedad que se destaca, sin lugar a dudas, como un gran punto a favor.

Las bañeras son antiguas y pueden ser difíciles de usar para las personas mayores. unas duchas serían más apropiadas. El colchón de muelles es bastante duro, lo que puede no ser del agrado de todos, junto con almohadas delgadas que no brindan mucho soporte. La opción de fruta o yogur por la noche sería ideal, dado que el restaurante más cercano está a 5 km, lo que puede complicar las cenas.

El entorno natural es impresionante y perfecto para desconectar. Las habitaciones son amplias y acogedoras, aunque durante nuestra estancia el calor fue notable, ya que no había aire acondicionado. Agradecimos el enfoque sin televisión, lo que realmente contribuye a la tranquilidad del lugar. Sin embargo, el acceso a la cena no siempre está garantizado. en varias ocasiones tuvimos que desplazarnos en coche para cenar, lo cual puede ser un inconveniente.

no entiendo por qué no hay aire acondicionado en pleno verano, eso es inaceptable, parecia un sauna. y si esperas un tv, pues tampoco lo hay, que sorprendente. casi escribo una critica buena, pero la falta de fruta o yogur por la noche fue el colmo de mi decepción!

me encantaría volver

La habitación n°14 era amplia, con vistas increíbles a las montañas. Todo estaba muy cuidado, me encantó el ambiente acogedor. El desayuno fue un placer, zumo, cruasán, pan con embutido, ¡todo buenísimo! La atención fue de diez, especialmente de Joxe Mari, que es súper atento y te ayuda en todo. Me encantó, perfecto para descansar.

Estuvimos con amigos y disfrutamos mucho. El desayuno estaba increíble, con café, zumo natural y croissants riquísimos. Joxema nos orientó sobre lugares para visitar, como las rutas cerca del hotel. Nos relajamos en la tranquilidad del lugar y se siente como en casa. Ideal para desconectar después de descubrir la zona.

La única pega fue que el servicio en el restaurante no fue el mejor. Nos hicieron sentir incómodos al sentarnos en una mesa sin mantel. Es algo que podría mejorar.

la cena no estaba siempre disponible. pero la atención fue increíble, especialmente de Joxe Mari. el desayuno fue delicioso, con cruasán y embutido. las vistas desde la habitación son espectaculares.